En el municipio de el Tuma / La Dalia, a 40 km de Matagalpa, los trabajadores agrícolas constituyen las cooperativas de vivienda de responder colectivamente a una de sus necesidades esenciales : tener un lugar de vida, de dignidad y auto-identidad.
están organizados, cubrir sus pedazo de territorio, e imagina un lugar de vida en el cual el poder de decisión pertenece a ellos. A cargo de nuestra misión.
En febrero de 2024, Leah Oswald y susanna Lerch, nuestros dos a cargo de los proyectos, se realizan en Matagalpa, Nicaragua. Durante su estancia, han participado en numerosos eventos, reuniones y discusiones, pero uno de sus mejores momentos fue la profundidad de la visita a las tres cooperativas de viviendas situado en el municipio de El Tuma / La Dalia, a 40 km de la ciudad de Matagalpa.
Estas tres cooperativas tienen algunos puntos en común : están compuestas 85 % de las mujeres, pero esto ha sido particularmente buscados. Estas mujeres son representativos de un grupo social es muy importante en este municipio : los trabajadores agrícolas, parte esencial de la cultura del café, la principal actividad económica del territorio. Los trabajadores agrícolas a sí mismos, o a un miembro de una familia de clase obrera, que se trasladó a un puesto de trabajo como profesor, han formado cooperativas de responder colectivamente a una de sus necesidades básicas, tener un lugar de la vida misma.
La cooperativa Victoria de Noviembre en la localidad de El Carmen fue capaz de construir una docena de casas a sus miembros en un terreno puesto a disposición por el municipio, y estoy experimentando la gestión colectiva de un barrio : plantaciones de árboles frutales, la construcción de una sala común, jardín de bambú vegetal compartido y pequeñas tiendas.
El co-op Nuestro Barrio, en el pueblo de Mora ha adquirido un hermoso terreno gracias al fondo rotatorio administrado por la central local de cooperativas de CECOVI, y ha completado el reembolso. Un proyecto de urbanización y la vegetación progresiva va a ser la primera » eco » en la región.
El co-op Voces Guerreras, en el municipio de La Dalia, llega a adquirir un terreno con cuerpo, muy bien situado, en la entrada de la aldea, también gracias al fondo rotatorio de auto-administrado. La propiedad de la tierra se realiza a través de un proceso participativo, orientado al fortalecimiento de la dimensión colectiva y el compromiso de todos los miembros y sus familias.
«Lo que ha afectado, en el curso de estas visitas, es la alegría que se manifiesta por estos grupos de personas organizadas, a grandes zancadas a su pedazo de tierra y imaginando un lugar de vida en el cual el poder de decisión pertenece», contarnos la historia de Leah y Suzanne. También han sido marcados por la red existente entre estas mujeres de diferentes pueblos : a través de reuniones y actividades conjuntas, organizadas en el marco del movimiento cooperativo, que comparten conocimientos, ayudar a los demás, pero también forman fuertes lazos de amistad.
Nuestra colaboración con Multipro, cooperativa de servicios a cargo de la asistencia técnica a cooperativas continúa en esta alentadora telón de fondo.
