Los interesados para replantear nuestras formas de vida en común.
sábado, 6 de julio, UrbaMonde Francia organizó un taller de discusión sobre el aprendizaje del proyecto de investigación CO-ESPERANZA (Colaboración de la Vivienda en caso de Pandemia de la Época), en el marco de los Encuentros Nacionales de Hábitat Participativo (RNHP), que se celebraron del 4 al 7 de julio, de Rennes, Francia. Estas reuniones han reunido a los actores involucrados a repensar nuestras formas de vida en común.
En la víspera de un momento político crucial en Francia, la segunda vuelta de las elecciones generales, lo que representa un riesgo sin precedentes desde la segunda guerra mundial para ver la extrema derecha fascista para tomar el poder en Francia, Alain Jund, presidente de la Red Nacional de Comunidades de Hábitat Participativo (RNCHP), y Michèle Cauletin, co-presidente del Hábitat Participatif Francia (HPF) han señalado, en su discurso de toma de posesión de la RNHP, la importancia de la creación de un vínculo social, la solidaridad y la esperanza de un cambio positivo para nuestras empresas a través de nuestra manera de vivir, de vivir juntos. Hábitat participativo en sus múltiples formas (cooperativas, sociedades anónimas, la auto-promoción de viviendas de alquiler social, de la luz del hábitat, oasis…) producto de las respuestas locales a la desintegración social y el clima de emergencia.
Peter Arnold y Marie Brandt de urbaMonde facilitado el intercambio enriquecedor que tomó parte Michèle Cauletin (HPF), Pascale Bourgeaiseau y Annie Le Roux (Haledad), Gizem Aksümer (Universidad de Lyon) y Christian Peer (de la Universidad Técnica de Viena TUW), los socios para la cooperación de la ESPERANZA. Juntos, con la puntuación del participante·es en este taller, se han explorado y se discuten los modelos de los austriacos, suecos y franceses participativo de la vivienda y de las experiencias individuales y colectivas vivido en el hábitat participativo durante el período de la pandemia de COVID-19.
La diferencia de vivienda social o privado tratado, hábitats, con participativo se distinguen por su capacidad para adaptarse a través de la gestión colectiva y la disponibilidad de grandes espacios compartidos interiores (habitaciones comunes, habitaciones, oficinas, salas de juego o de lectura, etc) o externos (balcones, terrazas, jardines). Esto ha permitido que los residentes·es hábitats participativo organizar rápidamente para adaptarse a los gestos de las barreras y limitaciones de las libertades impuestas en 2020-2021. Si, como en otros lugares, las tensiones fueron capaces de estallar en temas tales como la vacunación o el respeto de las reglas son draconianas, el 96% de los encuestados en el proyecto CO-ESPERANZA (339 encuestados en cinco países europeos) han encontrado que es beneficioso para vivir en un hábitat participativo durante la crisis de la salud. Consideran que esto ha sido una ventaja para adaptarse a la época de la COVID-19.
En Francia, la financiación de un proyecto de participación de la vivienda sigue siendo un desafío. Es difícil para la financiación de un proyecto de hábitat participativas para la auto-promoción, porque a los bancos no jugar el juego para adaptar sus préstamos a los individuos o a los promotores de los profesionales en estos grupos de ciudadanos heterogéneos que quieran desarrollar su proyecto inmobiliario, colectiva, y a menudo anti-especulativa. Peter Arnold discutido este tema durante una sesión organizada por Casa Mañana, destacando el papel de alternativa a los bancos o convencional, Alemania, España, países bajos y Suiza, por el contrario, la financiación de proyectos innovadores que son su seña de identidad y orgullo.
Para ir más : https://www.habitatparticipatif-france.fr
Estado de la escena del hábitat participativo en Francia, presentó a la RNHP2024
Manifiesto hábitat participativo popular, firmada al final de la RNHP2024
Vídeo de la conferencia «Vivir es crear» por Miguel Benasayag, RNHP2024


